La vaginosis bacteriana se trata de una afección en la zona íntima de la mujer producida por una alteración de las bacterias sanas que la protegen, lo que permite que los microorganismos dañinos proliferen de una manera excesiva, causando a su vez un flujo de color gris o amarillento que viene acompañado por lo general de un olor muy fuerte. Aunque esta condición no es muy grave, resulta incómoda al provocar picazón y ardor al orinar entre otros síntomas. Por ello te vamos a mostrar algunos remedios naturales que resultan muy seguros y sencillos de utilizar.
Yogur natural
Un yogur natural enriquecido con probióticos resulta un excelente remedio para hacer frente a la vaginosois bacteriana. Con este alimento se consiguen las bacterias saludables de la flora vaginal y se aumenta la respuesta para luchar contra los gérmenes causantes de las infecciones. Es necesario comprobar que el yogur crudo tenga cepas de lactobacilas para conseguir los beneficios de las bacterias y levaduras que afectan a esta zona del cuerpo.
Tanto su ingesta como su aplicación tópica logra aliviar la infección provocando efectos muy parecidos a los de la clindamicina.
Aceite esencial de árbol de té
Este aceite es antibacteriano y antifúngico y sirve como remedio contra diferentes tipos de infecciones. Sus propiedades consiguen alterar el ambiente que los microorganismos necesitan para poder proliferarse por lo que se disminuyen las complicaciones de estas afecciones. Igualmente resulta muy útil para neutralizar los olores de la zona íntima al reducir el número de bacterias que se encuentran presentes en los fluidos de la vagina.
Hay que incorporar algunas gotas del producto en el agua de la bañera y diluirlo muy bien para usarlo como enjuague cada día.
Vinagre de sidra de manzana
Este vinagre regula el Ph ácido de la zona vaginal lo que hace que disminuya la inflamación y la picazón provocada por la vaginosis bacteriana. Tiene cualidades antiinflamatorias, antisépticas y antifúngicas que consiguen disminuir el crecimiento de las bacterias para poder controlar la infección.
Para utilizarlo hay que añadir dos tazas de este producto en un barreño con agua templada y hacer un baño de unos veinte minutos aproximadamente.
Agua oxigenada
Un agua oxigenada al 3% puede ayudar como apoyo para controlar los síntomas producidos por una vaginosis bacteriana. Sus poderes antibacterianos consiguen frenar el excesivo crecimiento de los microorganismos así como regular el pH del área afectada. Se recomienda para disminuir un exceso de secreción vaginal, los malos olores, la picazón y el ardor.
Se recomienda su utilización mezclando a partes iguales agua y el agua oxigenada, ya que un uso directo puede resultar agresivo para la piel.
Aceite de orégano
Este producto natural suele dar muy buenos resultados frente al tratamiento de las infecciones que afectan toda esta zona. Sus compuestos antiinflamatorios y antisépticos consiguen reducir el grado de la infección así como acelerar el proceso de recuperación.
En este caso la recomendación es mezclar dos o tres gotas con una cuchara de aceite de coco que se debe frotar con un algodón en la zona afectada.