Cuando la hemoglobina de la sangre se reduce, aparece la anemia, una afección que casi siempre se debe a la deficiencia de hierro o a ciertos nutrientes como la vitamina B12 o el ácido fólico. Aunque se puede dar en todas las personas, las más afectadas son las mujeres y los niños, trayendo su presencia dificultades a la hora de oxigenar las células que a su vez, interfiere en el correcto funcionamiento de algunos órganos muy importantes para la salud.
Por ello quienes la padecen se encuentran en un estado de fatiga continua y pueden llegar a desarrollar hipertensión, pérdida de memoria y diversas infecciones. Para evitarlo vamos a proponer algunos alimentos naturales que alivian este problema. ¡Apunta!
Espinacas
Son ricas en nutrientes y bajas en calorías ocupando uno de los primeros puestos como alimento que ayuda a reducir la anemia. Contiene vitaminas A y B, las dos necesarias para controlar la fatiga y fortalecer las defensas. Aporta también zinc, calcio e hierro que promueven la producción de hemoglobina y contribuyen a restablecer la circulación para conseguir una correcta oxigenación de los tejidos. Lo recomendable es tomar al menos media taza de espinacas para conseguir un 20% del hierro necesario.
Avena
Este alimento contiene sustancias antioxidantes, vitaminas e hierro que son claves para el tratamiento de la anemia. Por otra parte su elevado aporte de nutrientes son fundamentales para ayudar a mejorar el transporte de oxígeno que aumentan el rendimiento mental y físico. Se deben consumir entre dos y tres cucharas de avena al día hasta que la anemia se cure.
Huevos
Un consumo regular de huevos ayuda a mantener al organismo con un alto nivel de energía ya que este alimento aporta minerales y aminoácidos esenciales que ayudan en la producción de anticuerpos y hemoglobina. Las propiedades nutricionales con las que cuenta disminuyen la anemia crónica y controlan sus síntomas como por ejemplo el debilitamiento de uñas y cabello.
Por ello se aconseja incorporar a la dieta regular huevos, preferiblemente para desayunar junto con un zumo de naranja, que favorecerá la asimilación de sus nutrientes.
Lentejas
Esta legumbre es una de las que más beneficios aporta a los pacientes con anemia. Su contenido en hierro ayuda en la producción de los glóbulos rojos y reduce las dificultades de circulación. Contiene sustancias antioxidantes y proteínas que protegen las células. Hay que consumir a la semana tres porciones de lentejas.
Hígado de res
Este tipo de carne es una gran fuente de hierro de muy fácil absorción y por consiguiente, uno de los mejores complementos nutricionales que existen para controlar este problema. Se recomienda consumir hígado de res dos veces a la semana como mínimo.
Granada
Aunque esta fruta no cuenta con un elevado contenido en hierro, si se incluye en la dieta se contribuye a mejorar los síntomas que provoca la anemia gracias a la fibra que contiene, así como el potasio y otros minerales esenciales.