Una solución totalmente natural para eliminar los callos de los pies
Si últimamente notas que la piel de tus pies está más dura y más reseca, lo más probable es que estés frene a uno de los problemas más habituales de esta zona del cuerpo, es decir, los callos.
Hablamos de una dureza que aparece por la fricción constante que sufre la piel con el calzado que a su vez es un evidente signo de deshidratación y de falta de exfoliación.
Por regla general aparecen en las zonas más sensibles como son la parte inferior del dedo gordo o el área plantar. Su presencia no es nada estética y en ocasiones, puede llegar a provocar dolor y grietas.
En la actualidad existen numerosos tratamientos farmacológicos que contribuyen a su eliminación, pero de manera opcional, también hay alternativas cien por cien naturales que ofrecen unos efectos parecidos.
Por eso en este artículo queremos compartir un tratamiento muy interesante y totalmente natural preparado con cebolla y con vinagre blanco, dos ingredientes que además ayudan a prevenir los hongos. ¡Apunta!
Solución natural para eliminar los callos en los pies
La combinación de la cebolla y del vinagre blanco cuenta con compuestos que ayudan a ablandar la piel más dura y así eliminar los antiestéticos callos que se forman en los pies. Con esta sencilla mezcla de ingredientes completamente naturales, ayudas a promover la limpieza de la piel y a disminuir la presencia de impurezas y de células muertas.
Los beneficios del vinagre blanco
Aunque este ingrediente se ha hecho muy famoso por sus numerosas aplicaciones dentro de la limpieza del hogar, es un producto con muchas utilidades que también puede aprovecharse con fines medicinales y cosméticos. Sus ácidos orgánicos regulan el pH de la piel ya que alteran el clima que las bacterias y hongos necesitan para multiplicarse. Además su ácido acético ablanda las callosidades y suaviza la dermis, disminuyendo también el exceso de sudoración y eliminando los malos olores.
Los beneficios de la cebolla
Pese al olor fuerte que tiene la cebolla, su alta concentración en compuestos antiinflamatorios y antibacterianos, hacen que sea un excelente remedio natural para los pies. Sobresalen entre sus componentes el magnesio y la vitamina C, nutrientes ambos que son esenciales para mantener en perfectas condiciones la piel. Además sus sustancias sulfurosas estimulan la regeneración de las células y disminuye su deterior prematuro.
Tratamiento con vinagre blanco y cebolla
Con este tratamiento conseguirás embellecer tus pies, ya que sirve para eliminar las ampollas, los callos y las infecciones fúngicas. Una aplicación regular del mismo ofrece unos muy buenos resultados.
Los ingredientes que vas a necesitar simplemente son media taza de vinagre blanco y una cebolla no demasiado grande. Lo primero que hay que hacer es meter en un recipiente de cristal el vinagre blanco. Después pela la cebolla y córtala en rodajas para agregarlas al frasco. Tapa y deja reposar entre cuatro y ocho horas.
A la hora de aplicarlo debes sumergir un trozo de algodón en el preparado y aplicarlo sobre los callos de los pies. Cúbrelos completamente y fija el algodón con ayuda de un poco de papel film transparente. Envuelve tus pies con unos calcetines y deja que actúe la solución toda la noche. Al día siguiente debes enjugar los pies con agua templada y frotar con una piedra pómez el callo. Repite este tratamiento durante siete o diez días hasta que notes mejoría.