Pelo brillante con acondicionadores naturales

Cada vez más se usan productos cosméticos caseros que resultan además de más naturales, más económicos. En el caso de los acondicionadores es recomendable optar por alternativas que no tengan siliconas o parafinas  y que son sustancias que pueden ser perjudiciales para la salud y provocar en el cabello un efecto rebote. Descubre a continuación cuáles son los mejore acondicionadores naturales para conseguir un pelo suave, brillante y sedoso.

Vinagre de manzana

Este ingrediente ya era utilizado por nuestras abuelas para tener un pelo sano y brillante. Hay que tener en cuenta que el olor a vinagre, en cuanto el pelo se seca, desaparece, pero si molesta mucho se puede mezclar con unas gotas de aceites esenciales de mandarina, menta, lavanda, etc. antes del último aclarado.

Para usarlos se puede preparar un bote de spray con tres cuartas partes de vinagre y una cuarta parte de agua y utilizarlo después del champú.

Cerveza

Además de una bebida refrescante, la cerveza es un excelente acondicionador para ganar suavidad y brillo en el pelo. Es rica en vitaminas del grupo B y en antioxidantes, así como en silicio, mineral imprescindible para tener una excelente estructura capilar, especialmente para las personas que tienen el cabello quebradizo y frágil.

Antes del último aclarado hay que lavarse el cabello con cerveza sin alcohol, para que no se reseque el cabello, y se deja actuar dos minutos. Basta con utilizar este acondicionador una vez a la semana y se puede ir alternando con otras de las opciones que se proponen en este artículo.

Aceite de coco

Este acondicionador natural debe aplicarse antes del champú, incluso dos horas antes, sobre el cabello mojado para que nutra perfectamente las fibras capilares y no se quede graso después de la ducha. Se aplica solo desde la mitad del cabello hacia las puntas, una vez a la semana o incluso dos. Además deja un delicioso aroma en el pelo.

Yema de huevo y jugo de limón

Esta combinación sirve para acondicionar cualquier tipo de pelo, sobre todo graso y con poco volumen. La yema de huevo contiene grasas que nutren en profundidad el pelo así como en vitaminas y ácido fólico, por lo que resulta un cóctel de lo más nutritivo para el cabello.

Por otra parte el zumo de limón le otorga al pelo mucho brillo, pero no se puede utilizar solo ya que resecaría en exceso las fibras capilares, por eso lo mejor es la combinación de ambos ingredientes que deben mezclarse para aplicar un rato antes de proceder al lavado del pelo con el champú habitual.

Aceite de jojoba

Este aceite vegetal es el que tiene una textura más parecida al sebo natural del pelo y de la piel, por lo que es una opción excelente para aplicar como acondicionador, ya que se absorberá con mayor facilidad y aportará una profunda hidratación.

Se debe aplicar en pequeñas cantidades antes de lavarse el pelo con el champú habitual. También se puede aplicar una gota en las puntas en cualquier momento si se tienen secas o se abren con frecuencia.