Un excesivo crecimiento de bacterias, residuos de alimentos y acumulación de placa, pueden llegar a causar desagradables olores en la boca, incluso después de cepillarse los dientes. Esta condición conocida como halitosis, puede llegar a provocar problemas de estrés social y de autoestima, especialmente cuando se está en contacto con otras personas. Por fortuna existen métodos naturales para refrescar el aliento así como para reducir la proliferación de gérmenes en la boca.
Perejil
Por su elevado contenido en clorofila, esta planta medicinal ayuda a limpiar la boca, incluso en aquellas zonas en las que no llega el cepillo. Su consumo elimina el olor desagradable dejado por los alimentos, además de ayudar a reducir una digestión pesada que también se encuentra asociada con este síntoma.
Para su uso se debe echar una cuchara de hojas de perejil en una taza con agua hirviendo y dejar que repose durante diez minutos. Después se cuela la bebida y se consume hasta tres veces al día. También se puede usar esta infusión para hacer gárgaras después del cepillado.
Cardamomo
Este remedio es ideal para tratar el mal olor en la boca así como para las infecciones orales causadas por bacterias en la misma, gracias a la cineola, una sustancia que ayuda en la limpieza de la cavidad bucal.
Machaca diez gramos de semillas de cardamomo y échalas en un vaso con agua hirviendo. Deja reposar durante quince minutos y cuélala. Realiza gárgaras con el resultado dos o tres veces al día.
Eneldo
Esta planta contiene clorofila, antioxidantes y otra serie de compuestos saludables que ayudan a refrescar de manera natural el aliento. Es perfecto para quitar los olores que deja el ajo y la cebolla, aunque también se puede usar para la halitosis creada por las bacterias.
Para prepararlo hierve un vaso de agua y añade diez gramos de eneldo. Tapa el resultado y deja reposar diez minutos. Consume esta infusión dos veces al día o utilízala como enjuague bucal.
Cilantro
Esta es un buena opción cuando se quiere refrescar el aliento frente a los olores provocados por los restos de comida. Añade una cuchara de semillas de cilantro en medio vasa de agua hirviendo y deja reposar diez o quince minutos. Cuela la bebida y realiza gárgaras después de comer con esta infusión. También puedes usarlo como enjuague después de cepillarte los dientes.
Jengibre
La raíz de jengibre cuenta con un gran poder antimicrobiano que combinado con el aroma cítrico del limón, hace que se consiga una refrescante bebida que elimina el mal aliento causado por infecciones o placa bacteriana.
Incorpora cinco gramos de jengibre rallado en un vaso de agua hirviendo y deja reposar durante diez minutos. Cuando esté preparada añade el zumo de medio limón. Con una pequeña cantidad haz gárgaras y el resto consúmelo como si fuera una infusión. Repite este tratamiento dos o tres veces cada día.
