Con la edad, la piel de los párpados va perdiendo elasticidad, entre otras cosas a que es más delgada a la de otras zonas del rostro, además de desarrollar arrugas prematuras por las agresiones del medio ambiente, como una exposición directa al sol, a las toxinas o a la falta de cuidados dentro de la rutina de belleza. También puede presentar alteraciones debido a cuestiones genéticas o por un excesivo consumo de tabaco y alcohol.
Por suerte hay remedios de origen natural que pueden ayudar a reafirmar el tejido de esta zona gracias a los nutrientes extras que ofrece. Toma nota.
Higos y limón
Las propiedades de los higos negros unidas a la del zumo de limón, hacen que se consiga una mascarilla muy rica en minerales esenciales y en antioxidantes que reafirman la piel de los párpados caída. Los dos ingredientes ayudan en la pérdida de la elastina y del colágeno además de nutrir las células.
Para preparar esta mascarilla se necesitan tan solo tres higos negros y una cuchara pequeñas de zumo de limón. Se lavan los primeros y se trituran hasta conseguir una pasta bien espesa que se mezclará con el zumo del limón.
Para aplicarla debe extenderse sobre los párpados y sobre otra zona del rostro si se desea. Se deja actuar durante media hora y después se aclara con agua templada. Debe evitarse que entre en los ojos ya que el limón es irritante. Se puede usar hasta tres veces a la semana y siempre por la noche, ya que el limón puede hacer que aparezcan manchas en la piel si entra en contacto con el sol.
Manzana y miel
Esta mascarilla tiene un aporte significativo de agua, antioxidantes y fibras naturales, por lo que es un remedio muy efectivo contra la pérdida de firmeza en la piel de los párpados de los ojos. Aplicándola de manera regular se previene la caída de la piel, la flacidez y la formación prematura de arrugas.
Se debe cortar en varios trozos una manzana y batirla hasta conseguir un puré espeso que debe mezclarse con dos cucharas de miel. Después se debe aplicar sobre los párpados para que actúe durante treinta minutos aproximadamente. Transcurrido este tiempo se enjuaga con agua fría y se repite el uso tres veces a la semana como mínimo.
Avena, miel y huevo
Estos dos ingredientes contienen minerales, aminoácidos esenciales y vitaminas que ayudan en la reparación de la piel caída y flácida, disminuyendo la pérdida de elastina y brindando un efecto rejuvenecedor y reafirmante en los párpados.
Prepara esta mascarilla con una cuchara de harina de avena, una yema de huevo y dos cucharas de miel. Incorpora la primera en un recipiente para mezclarla con la yema de huevo y la miel. Con el resultado frota sobre los párpados y por el resto de la cara si lo deseas. Deja que actúe durante media hora y enjuaga con agua fría. Debes utilizarla dos o tres veces a la semana.