Aunque la tos puede aparecer a cualquier hora del día, es necesario tener cuidado especialmente si ésta se produce durante las noches. En estos casos es muy importante ingerir bastante líquido, sobre todo templado o caliente, para conseguir hidratar toda la zona y así ayudar en la eliminación del exceso de mucosidad. A continuación podrás encontrar algunos tratamientos totalmente naturales para combatir la tos que aparece por la noche.
Zumo de miel y de limón
Los ingredientes que vas a necesitar son: un vaso de agua templada, el zumo de un limón y una cuchara pequeña de miel.
Se deben mezclar todos los ingredientes muy bien y beber el resultado a pequeños sorbos antes de acostarse en la cama. De esta manera se puede disfrutar de las propiedades suavizantes y sedantes de estos ingredientes que ayudarán a las vías respiratorias y mucosas. Además la vitamina C que aporta el limón, ayuda a que las defensas mejoren además de ser un enorme antibacteriano y antiséptico. La miel por otra parte también es antiséptica a la vez que antioxidante, ayudando a aclarar la garganta.
Gárgaras con sal y agua
En este caso simplemente se van a necesitar unos cinco gramos de sal gruesa y media taza de agua templada. Se mezclan ambos ingredientes en un vaso, se coloca en la boca el resultado y se hacen gárgaras con él. Se debe recordar que el agua no se tiene que tragar y desecharla una vez que se haya terminado de hacer las gárgaras.
Cebolla y ajo
Ambos vegetales cuentan con un enorme poder antibacteriano y antiséptico que ayudan a eliminar cualquier bacteria o virus que se encargue de provocar la tos. Además de aconsejarse que se consuman crudos durante las comidas, se puede hacer un caldo con ellos. Para ello se necesita media cebolla, un diente de ajo y agua. Se colocan todos los ingredientes en un cazo y se calienta. Se filtra el resultado y se bebe como si fuera una sopa o una infusión.
El sabor el probable que no agrade mucho, por lo que se puede añadir unas gotas de limón y consumir antes de irse a la cama.
Líquidos y bebidas
Si la tos por la noche es muy frecuente, se puede dejar junto a la cama una botella de agua y beber mucho líquido durante el día, como por ejemplo zumos de frutas naturales e infusiones de hierbas como por ejemplo de té verde, de hinojo y de anís.
Leche
Aunque para muchas personas los productos que contienen lácteos son un sinónimo del aumento de la mucosidad, lo cierto es que a no ser que se sea intolerante a ellos, se puede disfrutar de una buena taza de leche templada o caliente endulzada con un poco de miel, un poco antes de irse a dormir. De esta manera se relajará la garganta y ayudará a conciliar el sueño.
