Remedios naturales para reducir la sudoración de los pies

Una sudoración en los pies excesiva, o lo que también se conoce como hiperhidrosis, es un síntoma que puede estar provocado por cambios en la actividad hormonal, por el estrés o por un uso inapropiado de calzado.

Aunque es un problema bastante común y no es grave, puede llegar a provocar una infección por hongos y malos olores, por lo que se recomienda su tratamiento cuanto antes, existiendo, por fortuna, varios remedios caseros que ayudan a combatir este problema.

Infusión de romero, menta y salvia

Si se combinan las propiedades antibacterianas y astringentes de estos tres ingredientes, se consigue un producto natural perfecto para disminuir el sudor excesivo en los pies y eliminar el mal olor.

Los ingredientes que se necesitan son dos vasos de agua, 20 gramos de romero, 10 gramos de hojas de menta y 10 gramos de salvia. Para prepararlo se pone a calentar el agua y cuando comience a hervir se añaden las hierbas. Se dejan reposar quince minutos y se cuelan.

Para su utilización hay que echar el resultado en un barreño y sumergir los pies durante veinte minutos. Transcurrido este tiempo se deben secar perfectamente y repetir tres veces a la semana como mínimo.

Té negro

El té negro contiene ácido tánico que regular el pH de la piel de los pies y evita la humedad en los mismos así como el crecimiento de bacterias y hongos. Aplicado en baños disminuye también los malos olores creando una capa que protege contra las infecciones causadas por acumulación de piel muerta y de las grietas.

Se pone a hervir medio litro de agua y cuando comience a hervir, se añaden tres cucharas de té negro. Se deja reposar durante quince minutos y se cuela la bebida antes de echarla en un recipiente en el que se deben sumergir los pies durante veinte minutos. Hay que repetir su uso dos o tres veces a la semana.

Bicarbonato de sodio

Este producto es antiséptico y astringente por lo que ayuda a neutralizar el sudor excesivo de los pies a la vez que elimina loso agentes infecciosos y los hongos. Su utilización equilibra el pH de la piel de esta zona del cuerpo impidiendo que se generen desagradables olores.

En este caso se necesitan tres cucharas de bicarbonato y tres tazas de agua. Se pone a calentar el líquido y antes de que hierva se echa en un recipiente al que se añade el bicarbonato, removiendo bien para que se diluya. En el resultado se introducen los pies y se dejan en remojo durante veinte minutos.

De manera opcional se puede añadir un poco de bicarbonato en el calzado y dejar que actúe doce horas como mínimo. Hay que usar este remedio tres veces a la semana por lo menos.

Cualquiera de estos remedios con productos tan económicos y sencillos de encontrar, si se utilizan de manera habitual, conseguirá que esa desagradable sensación de sudor excesivo y mal olor en los pies, termine por desaparecer.