Una cicatriz debe comenzar a tratarse cuanto antes ya no solo por cuestión de estética sino para que la piel también se regenere totalmente. Con alimentos que sean ricos en minerales y en vitaminas o con ungüentos naturales que se pueden preparar en casa, conseguiremos que las cicatrices desaparezcan.
Vitamina A
Esta vitamina ayuda a que la piel se conserve en un buen estado favoreciendo su cicatrización. Existen alimentos que la contienen y que se deben consumir como por ejemplo la zanahoria, la calabaza, el boniato, las espinacas, el brécol, el melón o el albaricoque.
Vitamina C
La vitamina C es un gran fuente de luminosidad y de energía que tiene poder antioxidante, hidratante, regenerante y vitalizante de la piel, por lo que ayuda en el proceso de la cicatrización ya que acelera la creación de células nuevas en la piel y en el desprendimiento de las células viejas.
Alimentos ricos en esta vitamina son los cítricos, los frutos rojos, el pimiento rojo, el brócoli y el perejil. También se pueden consumir algunos suplementos de vitamina C como por ejemplo los elaborados con acerola en polvo y que son los que mejor asimila el organismo.
Silicio
El silicio es uno de los suplementos más importantes para un correcto funcionamiento celular y por consiguiente para la piel. Son muchas las cremas reafirmantes que lo tienen incluido en sus ingredientes puesto que mejora de una manera muy notable la elasticidad de la piel. Se puede encontrar en el aguacate, en la alfalfa, en el arroz integrar, en la cola de caballo, en la avena integral, en el pepino, en los puerros, en la remolacha y en el queso.
Ungüento natural
Para preparar un ungüento natural muy eficaz en casa se necesitará un poco de aloe vera, bien extrayéndolo del interior de la planta directamente o comprando un poco de gel de aloe; un poco de aceite de rosa de mosqueta, un poco de aceite esencial de lavanda y un poco de vitamina E en cápsulas que se pueden encontrar en farmacias y herbolarios.
En un recipiente de cristal se mezcla la misma cantidad de aceite de rosa de mosqueta y de aloe vera (50 ml. aproximadamente de cada uno), y se añaden 10 gotas de aceite de lavanda y 10 de vitamina E. Se remueve bien con la ayuda de un utensilio de madera y se guarda en el frigorífico para que se conserve mejor. Se aplicará dos veces al día como mínimo, preferiblemente por las mañanas y por las noches.
Para cicatrizaciones difíciles
Si la cicatriz es un poco más profunda se puede aplicar a modo de mascarilla, un poco de miel orgánica sobre la zona a tratar. Se debe dejar actuar durante diez minutos como mínimo y tres veces cada día. También resulta un remedio excelente aplicarse una crema de propóleo que se puede encontrar en cualquier herbolario y que al contrario de otro tipo de cremas químicas convencionales, no provocará ningún tipo de inflamación.